26.08.15

La lógica de AMLO

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Con esta movida, López Obrador –bajo la venia de sus incautos fariseos– se coloca en su posición favorita: la trinchera.

En su momento pareció inexplicable el ofrecimiento “electoral” que Andrés Manuel López Obrador hizo a la infame CNTE cuando, a manos del Gobierno Federal, ésta perdió el control del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO), una de sus mayores fuentes de ingresos. Con su habitual semblante sereno, el líder de Morena se dirigió a los líderes sindicales en un video. Les dijo:

“Quiero hablar con ellos, con la directiva de los maestros de Oaxaca, estoy por este medio solicitando una audiencia, un encuentro con los dirigentes (…) creo que podemos llegar a un acuerdo amplio para echar a andar una alianza de organizaciones sociales con Morena con miras a las elecciones próximas de Oaxaca para revertir todas estas decisiones [i.e. reforma educativa], lo podemos lograr, se puede establecer en Oaxaca un gobierno del pueblo y para el pueblo.»

Lo de menos son las ideas o las causas: el chiste es el reflector.

La gran mayoría de la comentocracia –incluida buena parte de los adeptos del tabasqueño– quedó absorta ante un viraje tan extremo. Está bien que Andrés Manuel sea de izquierda –dijeron– pero apoyar a una de las organizaciones más desprestigiadas del espectro… ¿no es acaso un suicidio político? ¿Para qué alinearse con el perdedor, responsable además de tan calamitosa situación educativa en aquel estado? Vaya locura. Tanto más cuanto que la propia CNTE descartó la oferta con displicencia, lo cual pareció dejar al ofertante en ridículo.

 Unos días después, sin embargo, el periódico Reforma realizó una encuesta para conocer la intención de voto para 2018, donde acorde con los titulares, “López Obrador arrasó.” Si las elecciones presidenciales se realizaran ahora, apuntaba increíblemente la medición, Andrés Manuel conseguiría el 42% de los votos ciudadanos, muy por encima del 28% de Margarita Zavala, en segundo lugar.

Como era de esperarse, en el fabuloso ping-pong que es la política, la CNTE se arrepintió de su original postura y decidió dar entrada a Andrés Manuel. “La CNTE”, leía la nota del Excélsior, “coquetea con López Obrador; propone diálogo abierto.” Cuestionado por el giro, Mohamed Otaqui Toledo, vocero de la asamblea de la Sección 22 del sindicato magisterial, aclaró que la invitación es sólo para contrarrestar a la reforma educativa. “Se cuidará no comprometer los principios rectores [de la CNTE], que rechazan vínculos con partidos políticos, pero en este caso es más con la persona”, apuntó.

Ingenuos y a la vieja usanza, los adversarios de Andrés Manuel –incluido el Presidente– empezaron a hablar de “populismos peligrosos”, una campaña tan sabida infructuosa, que la propia esposa de su original ideario, Felipe Calderón, de inmediato se distanció. La campaña AMLO es un peligro para México, consideró Zavala, “es cosa del pasado.”

Ahora es mucho más claro el panorama. Con esta movida, López Obrador –bajo la venia de sus incautos fariseos– se coloca en su posición favorita: la trinchera. Lo de menos son las ideas o las causas: el chiste es el reflector. Prepárense para tres años de Donald Trump en México. A ver si la tercera es la vencida.

*Este artículo se publicó el 21 de agosto del 2015 en Animal Político: Liga